El ex director de la Policía Local, Fernando Telpuk, consideró que el escándalo de corrupción por el que cuatro policías del Comando de Patrullas están imputados “no es un hecho nuevo”.
A una semana de que el director de la Policía Local, Fernando Telpuk, fuera removido de su cargo, consideró que el escándalo de corrupción por el que cuatro policías bonaerenses del Comando de Patrullas están imputados por defraudar al Estado “no es un hecho nuevo”.
“El combustible de los patrulleros históricamente fue una caja en donde echaron mano los comisarios y policías sin controles. El municipio debe ser el primer interesado en que el combustible vaya a los móviles para que esos móviles recorran la ciudad, porque si no hay combustible no recorre, y sino recorre no hay prevención”, expresó Telpuk en diálogo con el programa radial Vencedores y Vencidos y agregó: “En el 2015 cuando empecé la gestión advertí una importante desprolijidad en la distribución de los combustibles en los móviles, entonces creamos en la Secretaria de Seguridad un Departamento que era de logística y se encargaba no sólo de chequear la carga de combustible, sino también de proveer de repuestos a la mayor cantidad de móviles de Policía de la Provincia de Buenos Aires”.
De esta manera, Telpuk recordó que desde esa área controlaban que los móviles recorrieran la cantidad de kilómetros debidos y que el combustible fuera al móvil correspondiente. “Era una forma de cuidar el dinero de los contribuyentes y de garantizar la prevención. En el 2016, con este sistema bien aceitado ahorramos, con respecto al 2015 más de 100 mil litros de nafta a la Provincia y no se afectó ni un solo turno de los recorridos, al contrario teníamos toda la currícula cubierta y es más, había móviles de back up. Estábamos en un nivel óptimo”, dijo el ex funcionario.
Sin embargo, Telpuk explicó que ese sistema de control cambió en 2016 y todas las partidas de combustibles “pasaron a mano de los comisarios, y no se garantizó un control estricto en su uso y eso permitió que pasara lo que pasó”.
“La Policía no quiere ser supervisada por una estructura civil”, enfatizó el ex director de la Policía Local y agregó: “Me da pena porque hay oficiales que son buena gente, pobre muchachos haber arriesgado su carrera por haber equivocado el camino de esta manera me da pena”.
Finalmente, sobre el caso de corrupción en el Comando de Patrullas de la ciudad, Telpuk concluyó: “Cuando hay uso de recursos públicos el control tiene que ser exhaustivo y cercano. Los civiles deben controlar qué hace la policía, es la única manera”.